RESEÑA DE LA SALIDA EN EL ALBERGUE DE LOS BATANES (RASCAFRIA)
El fin de semana del 18 y 19 de mayo, por fin realizamos la tan ansiada “excursión de albergue”, punto culminante de los planes senderistas de la familia palomera.Algunas familias […]
AFA La Paloma
Asociación de Familias del Alumnado del CEIP Nuestra señora La Paloma
El fin de semana del 18 y 19 de mayo, por fin realizamos la tan ansiada “excursión de albergue”, punto culminante de los planes senderistas de la familia palomera.Algunas familias […]
El fin de semana del 18 y 19 de mayo, por fin realizamos la tan ansiada “excursión de albergue”, punto culminante de los planes senderistas de la familia palomera.
Algunas familias fueron abriendo boca y ya desde el viernes durmieron en el Albergue Los Batanes, todo con tal de no perderse ni un solo momento de tan magno evento (y ahorrarse de paso el madrugón del sábado…).

El sábado por la mañana a eso de las 10:00 nos fuimos congregando todos los asistentes en el aparcamiento del albergue y, tras llegar los rezagados, procedimos a dividirnos en los habituales grupos de “mayores” y “peques”.


El grupo de “MAYORES” realizó la ruta a la Cascada del Purgatorio, unos 11 km de recorrido ida y vuelta por una cómoda pista y posterior sendero hasta alcanzar este famoso salto de agua, que en esta época luce estupendo por las últimas lluvias.


El grupo de “PEQUES” realizó una cómoda ruta de casi 9 km, compartiendo un rato camino con los “mayores” y separándonos luego para ir a lo largo del río Lozoya (o de la Angostura) hasta llegar a una praderita donde comer los bocatas y descansar para volver por el mismo camino.
Una vez reunidos los dos grupos, descansamos, jugamos y comimos unos merecidos helados en Las Presillas, aprovechando que el tiempo nos respetó bastante.
Por la tarde, tras el reparto de habitaciones, dedicamos algo más de una hora a realizar unos talleres de peques (y no tan peques, que había adultos y adultas con mucho interés). En uno les explicamos el uso de las mantas
térmicas (recordad, lado “sol” para mantener el calor y lado “luna” para refrigerarnos), y en otro pudieron
ver rastros de animales como huellas, egagrópilas, cornamentas, etc y se llevaron su huella favorita en
arcilla.


Tras una noche de lo más entretenida y emocionante, compartiendo habitación con los amigos, el domingo amaneció con amenaza de tormenta, así que reorganizamos la excursión para poder disponer de los coches en caso de necesidad.
Todos juntos fuimos andando por un bonito sendero hasta llegar al Mirador de los Robledos, donde se encuentra el Monumento al Guarda Forestal. Allí sacamos los bocatas y disfrutamos de la fantástica panorámica que nos brinda ese lugar.


Por fin rompió a llover, por lo que aquí ya nos separamos y los que quisieron se subieron a los coches para dar por concluida la excursión y el resto volvimos andando hasta el albergue, haciendo un total de casi 11 km muy disfrutones.
Como siempre, fue una magnífica experiencia, 106 personas disfrutando de la compañía y de la naturaleza.